lunes, 29 de diciembre de 2014

Estoy enfermo de mí mismo.
Te odio, rostro impune.
Te odio, media sonrisa.
Calla tu risa. Calla por siempre.
Cierra los ojos.
7 por una noche, 100 por una vida.
No hay vida, no hay nada, no hay enigma.
¿Por qué insistes?
¿De quién te escondes?
Los monstruos se han ido.
No son ellos tu temor.
Te temes a ti mismo.
Te temes, te odias.
Por ser lo mejor para ella
he de matar mis demonios.
He de callar mi propia voz.
Aclamar al Dios de un cielo más alto.
Poner alto la condena del tiempo.
Dar tiempo al camino, al viento.
Asfalto de luces, la ruta celeste.
Guíame en mi odio a la sombra.
Intolerable deseo impermeable,
Mi corazón arde y debo aprender.

Sin instantes.

Eres mi ultimo rastro de cordura.
Y a la vez mi locura.
Guardo en ti todo el sentido.
¿Estoy dormido?
Ni vivo ni muerto.
Ni mañana ni antes.
Ganar-Ganar.
¿De que me sirven los días sin instantes?

domingo, 28 de diciembre de 2014

Dudas

¿Cuál es el nombre de esta luz difusa que se oculta tras tu sombra?
Dime cómo he yo de llamarte. Cómo he de amarte. Enséñame a ser.
Mantenme despierto que creo que estoy muerto en la paz de este sueño,
es que siento que sin requerir dueño, tuyo quiero ser.
Solo pienso en volver.
¿Qué más puede haber?

Huele a soga de ancla en el puerto de noche.
Huele a miedo de ausencia en la cama en que duermo.
Huele a saudade de ti en mis ojos.
Arranca las vendas, tus manos ensueño.
Arranca mis besos, tus labios: verdad.

¿Qué ha de ser si después queda solo el jamás?
Ya no más no saber ¿Que no ves?
Una carta de adios absoluto, sin rastro de llanto.
Buscando la marca, la huella, un después.
¿Ya lo ves? ¿O no es nada?
¿Sabes tú en que palacio se ocultan las dudas?
Sin otro instante y momento que ser para ti.
Sin otro dios u otro templo que tu piel desnuda.

viernes, 26 de diciembre de 2014

A.R.T.E.

Encendí la televisión emocionado, eran ya las 11:14 PM, algo más tarde de la hora de inicio del programa y la entrevista ya había empezado... los dos reíamos, no recuerdo bien por qué, ahora mismo solo puedo pensar en lo raro que fue verme a mí mismo en la pantalla.

—Y cuéntanos Mateo: ¿De dónde...
—Matthew.— Lo interrumpí.
Él se rió, medio dejando de lado mi comentario —Claro, Matthew. Algunos te han llamado un genio, otros te han llamado un artista incomprendido... otros dicen que no eres más que un pobre idiota que se hizo famoso de pronto... Entonces dinos: ¿De dónde te inspiraste para crear tu obra?
—He ahí el problema: Yo no lo creé. Yo sólo fui el medio por el cual la obra surgió. De toda la cornocopia existencial yo no fui más que el origen de esa idea, de esa unidad básica de la creatividad.
—Bien, bien... Un pensamiento muy profundo sin duda alguna.— El conductor se volvió a reir... pobre tipo. Se ve que no entiende nada de nada. —Y nos dicen que tienes un anuncio que darnos hoy Matthew. Cuéntanos cual es la noticia.
—Claro, con gusto... me enorgullece mucho poder decir aquí el día de hoy en tu programa, que recientemente se dio luz verde a que yo realice mi película.— Hice una muy merecida pausa dramática en la cual me quité los lentes oscuros.— Y justamente esta mañana comenzamos con las filmaciones.
—¡Un aplauso, por favor, señoras y señores!
Me veo bien mientras sonrio y saludo con todos esos aplausos sonando.
—Muchas gracias, me han concedido total y completa libertad creativa para realizar este largometraje, así que es mi intención poder plasmar en él no solo mi visón artística, sino que quede marcada también mi visión del mundo. Espero que cuando se estrene todos vayan a verla y la disfruten mucho.

Apagué la televisión mientras hacían una toma del publico aplaudiendo de nuevo.
Así es. Ese soy yo. Matthew. El genio, el loco, el pendejo incomprendido. "La promesa del arte cine de arte mexicano" digo citando textualmente a un critico de cine del que la verdad ni siquiera había oído hablar... pero oye, se ve que sabe de esto.

Me reclino un poco en mi asiento, asiento de mi oficina. Así es: Mía. Solicité al estudio un espacio desde el cual pudiera encargarme de realizar toda la planeación y el trabajo creativo, y me la dieron... Debería haber pedido que tuviera un mini-refrigerador. Pero bueno, tengo mi escritorio y hasta me dieron mis tarjetas.
"Matthew García"
"Realizador y cineasta"
DE PO CA MA DRE.

Me permito por un momento pensar en como en menos de un año y sin siquiera desearlo pasé de ser un nini promedio viviendo la vida pendeja, a ser reconocido como artista. Pasé de "15% de los jovenes mexicanos no estudian ni trabajan" a "Joven artista es furor en la Cineteca Mexicana"... Pensar que todo comenzó con el tostador roto que tengo en mi escritorio.

Leonardo estaba grabando, porque le dije que grabara. Es por eso que siempre digo que eso no fue casualidad, yo sabía que esto no sería cualquier cosa. Debo haber visto el video unas 2000 veces, sin exagerar, entre el video original en Youtube, en presentaciones por aquí y por allá, en exhibiciones, y en Facebook bastantes veces, subida por gente que de seguro no entiende que mierda está ocurriendo. Gente que no entiende el arte... Aun así la versión MLG Montage me dio risa, no les voy a mentir.
No puedo resistirme, es como pedirle a un gran cocinero que se resista a la delicia de su propio platillo. Abro mi computadora para encargarme de la vez 2001.

Primero Leonardo se apunta a sí mismo y después apuntó al tostador por un instante y posteriormente a mí. Estábamos en el patio de atrás de mi casa, sobre el camino de cemento que hay allí.
Le pregunté "¿Ya?" no dice nada, pero creo que alguna seña hizo porque entonces empiezo a hablar.
—Esta es la herramienta maldita: el sumo pontífice de la rutina y de la opresión, esta es la máquina.
Y entiéndanlo: esta no es una crítica a este motor de la apatía.— Señalo al tostador en ese momento. Puro. Pinche. Arte. —Ni siquiera es una crítica a su sistema. No es otra cosa que un grito desesperado, un intento por despertar a mis hermanos de la oligarquía de su mecanismo. Amén.
saco un marcador de esos permanentes que huelen bien chingón y le pinto una cara al costado del tostador.
—Ahora, Leonardo, permítele al mundo atisbar el rostro del tirano.
—Mateo ¿Qué pedo?
—Acerca la cámara y ya, güey.— Leonardo nunca ha tenido lo que algunos llaman "mente de artista"—No será sino cuando todos vean el rostro del opresor, que este perderá su poder. 
Salgo de la toma, y en mi pantalla claramente veo el tostador y el rostro que tiene dibujado.
Se oyen pasos y se ve como me voy acercando, lentamente.
Arte.
Aguardo unos momentos.
Arte.
El bate golpea el tostador justo en medio.
Arte.
Otro golpe, directo al rostro.
Arte.
Uno más.
ARTE.
La maquina está muerta.
ARTE.
Se muestra un par de segundos de sus restos y después vemos mi rostro. El rostro del genio, el rostro del artista, el cual jadea ligeramente.
Miro a la cámara unos instantes y sonrío.
El video se corta.
A.R.T.E.

viernes, 19 de diciembre de 2014

Mejor que cualquier cosa.

¿Es onírico romance esto?
Es mejor que cualquier cosa.
Lo juro que el delirio me causas
mas esto es idílica verdad.

La luz ilumina tenue su rostro
la noche brilla fuerte en sus ojos
su dulce aroma retumba en mis sentidos
y me guía, me guía sin saber.
¿Y sin temer? Que se yo.
No sé ya nada.
Pero es todo como debe ser.
Lo sé, y arde mi pecho en certeza
tanto como en tu búsqueda mi boca.

Sé mi voz, sé mi suerte, chica loca.
No puedo estar sin besarte, sin verte.
No hay tortura peor que este anhelo de ti.
¿Cuál es el sentido si no he de tenerte?
Ser el pan mío de cada día.
Brújula de mi poriomanía.
Destino. Mi porvenir.

¿Es onírico romance esto?
Es mejor que cualquier cosa.
Pues te has vuelto tú mi causa
¿mi sueño? No, mi realidad

miércoles, 17 de diciembre de 2014

Un esfuerzo sobrehumano para que mi voz no se quiebre, mientras le explico como atar correctamente el listón a un niño que aun no entiende del todo lo que su color negro significa.

domingo, 14 de diciembre de 2014

Sobre el tiempo y otras cosas.

Voy a decirlo simple: El tiempo es inexorable.

Me siento más minúsculo ante el tiempo que ante el espacio. Puedo ver la profundidad de las estrellas, y cuando estoy alejado de todo y de ti veo aun más en el cielo de noche. Sin embargo, esto solo se debe a que esa luz de cada estrella, luz que transita a la velocidad más alta que existe en este universo, ha recorrido todo el espacio que nos separa. Cosa que le ha tomado millones de años, y millones de años más. Tanto es así, que muchas de ellas pueden haber estallado hace millones de años y la luz de ese estallido llegue a nosotros un unos cuantos millones más.
En cambio el espacio simplemente está: siendo, sí.
Enorme, vasto, sí.
Pero sin consciencia. Estático salvo por el tiempo.
Sin el tiempo, la existencia no es más que la imagen de el fondo de pantalla de algún geek... o puede que el rompecabezas que algún sociópata masoquista decidió armar.

Antes la mayoría de mis pensamientos rodeaban ese tipo de cosas. Ciencia y demás pendejadas que se dicen funcionales... Los conceptos, sobre todo. En especial el cómo explicarlos de una manera que no tuviese tanta... pues ciencia. A menudo siento que las disciplinas se van rodeando de conceptos y complejidad por el propio ego de los miembros de cada gremio.
Así es como al final los libros y la Internet acaban repletas de mil y un glosarios de términos. Que el glosario de los cineastas, el de los diseñadores, no puedes ejercer abogacía sin hablar el idioma jurídico, en la medicina es aun peor. Hasta la pinche filosofía... semiótica... carajo, hasta la palabra semiótica es un termino pretencioso. Termino pretencioso para una disciplina igual, si no sabes lo que es: QUE PINCHE SUERTE TIENES DE NO HABER ESTUDIADO ESO POR UN SEMESTRE.

Me he vuelto a desviar, supongo que porque me estoy limitando a escribir sin preocuparme por una estructura... Así que volveré al asunto de la ciencia... el pedo es que nos enseña gente que no sabe banalizar las cosas, carajo.
¿De qué me sirve a mí como alumno que me sepas decir que el universo tiene 3 dimensiones espaciales y una 4° temporal si no sabes explicármelo banalmente?
Dímelo como sea, joder.
El universo es el contenido de un vaso.
Agregamos 3 tazas de agua.
PUM.
3 dimensiones espaciales.
Son 3, pero son inseparables, no podemos decir "de acá pa'ca es la 1° y la 2° empieza aquí."
Una taza de aceite.
PUM.
¿Se unen?
No, pero sin embargo siguen siendo el mismo contenido. El mismo universo.

Si me hubieran explicado de una manera similar en primaria no habría sufrido con Física en secundaria.
Siento que gran parte de eso fue una perdida de tiempo...
Y volvemos al tiempo. Inexorable ¿No les había dicho?
Al final siempre volvemos a él porque es nuestra condena:
Podemos escapar de cualquier cosa pero cuando más escapemos de todo, más nos damos cuenta de que no podemos huir del tiempo.
Pero muchas veces somos pendejos e insistimos.
Nuestra estupidez: Otra cosa inexorable.
CUANTO ANTES ACEPTES QUE TANTO TÚ COMO TODOS LOS SERES HUMANOS DEL PLANETA SON UNA BOLA DE PENDEJOS EN UNO, OTRO O AQUEL ASPECTO; MÁS FELIZ VAS A SER.
Entiende que no eres más inteligente, solo eres pendejo en otra medida y hacia otro punto cardinal.
Abraza tu pendejez. CONÓCELA.
Acéptala.

Aceptar es una acción poderosa.
Ni tolerar ni ignorar.
Tolerar es conformismo.
Ignorar es elusión.
Dos formas de pasividad.

Aceptar es eso.
Aceptar.
Llevo como dos minutos pensando en una manera de decir esto sin que se oiga como frase mal armada de motivadorsucho profesional, pero no se me ocurre como, así que ahí va:
Aceptar es la única manera que tenemos de pensar de manera realista a la vez que activa.
Aceptas consciente.
Aceptas cuando no tienes poder de cambiar las cosas, aceptas cuando lo tienes, e incluso aceptas cuando lo tienes pero no quieres.

Ponle que te hayas con alguien que difiere de tu punto de vista.
Hijo de la gran puta, yo era de esos cabrones que si encontraban a alguien que tuviera un punto de vista diferente al mío era capaz de discutir hasta dejar seco el puto tema.
Un día me cansé, y empecé a ignorar. Me quedaba con esas ganas de mentar madres...
Y un día (pasados unos cuantos centenares de días ya) me vi envuelto en una situación, en la cual al final dije "Meh, a la verga, soy el perro Buda" y dije -No hace falta que pensemos igual, va, voy a aguantar que pienses como se te pegue la gana.-
Para muchos eso ya es ganancia... Pero eso te deja con la pinche espina clavada. Tolerando... AGUANTANDO. Es como tener una espinita del disgusto por algo ajeno. Como cuando eras niño y veias a alguien comer algo que para ti era asqueroso. Esa misma pinche cara de asco, pero interna.
Aceptar es como cuando creces y de pronto ves el plato y dices "bueno, esta madre no me gusta, pero el hecho de que no me guste no significa que me disguste."

Odio la mayonesa. La detesto. Pero puedo ver a mi novia comiendo algo que tiene mayonesa y no me va a dar asco ni me va a molestar, no se me va a antojar comer de su plato... pero es SU PINCHE PLATO...
De la misma manera gente educada, inteligente y correcta puede sostener ideas diferentes a las mías con respecto a mil y un chingo de cosas.
¿ENTONCES POR QUÉ NO SOMOS CAPACES DE ACEPTAR?
Tolerar es tener la espinita del desagrado clavada.
Aceptar es darte cuenta de que la pinche espina te la clavas tú solo.

Y quizá la cosa más difícil de aceptar para algunos es el "No sé."
Pero eso tiene sentido: Como especie somos curiosos y odiamos no saber.
Por algo cada cultura antigua se inventó su mito de la creación y una historia para su origen: estamos dispuestos a llenar el "No sé" con lo que séa.
Nos hacemos pajas mentales por no saber... y sin embargo, por ejemplo.
Una vez que aceptas el "No sé" sobre el mañana, las preocupaciones se van porque solo queda una cosa y son tus propias acciones.
No sé, pero sé quién soy. Mis acciones son un reflejo de quién soy, y por lo tanto sé que por mi parte todo va a ir bien.
Y eso es lo que me encanta del No sé.
Es dulce.
¿Cuál sería el pinche chiste si supieras?
Después de todo es probable que lo mejor del día de hoy es algo que hace 6 meses ni te hubieras esperado.

martes, 9 de diciembre de 2014

Para la mayoría acaba allí.

Es sencillo: Te dan la receta, te tomas tus píldoras. Dos cada noche.
O tus frasquito con gotas.
1, 2, 3, 4, 5, 6, 7.
Me gusta el 7.
8, 9 y 10 si es que es una mala noche.
Y BAM, todo normal.
Adiós insomnio.
Tomas tu dosis cada noche
Duermes.

Para la mayoría acaba allí.

Nada más.

Pero aun así eso basta para exaltar a algunos y hacerlos hablar sobre cambios en la personalidad, tolerancia a químicos, farmacodependencia...
Normalmente son comentarios de gente que nunca lo ha usado.
¿Por qué no? Porque no lo ha necesitado.

Pero aun así, lo repito, para la mayoría de la gente acaba allí.

Acto insolemne

Si de cuando en cuando lloro sin hallarte.
Cuando sufro sin tocarte.
Acto insolemne.
Mente insomne.
¿Y tus besos dónde quedan?
No puedo andar si no es contigo.
Si al verte se deshizo el miedo
a lo visto y lo desconocido.

Sin ti ahora estoy perdido.
Inmune al desahogo de tu tiempo.
Demente sin tu cuerpo.
A veces ni recuerdo bien
a qué huele tu piel.

Permite recordar.
Aroma de piel dorada.
Déjame recorrer.
Hasta la última pulgada.
Besarte.
Mirada.

No puedo mirar si no son tus ojos.
No puedo besar si no son tus labios.
Si al verte se deshizo el miedo
a lo visto y lo desconocido.

No me basta un instante de placer.
Quiero mil horas de ti.

viernes, 5 de diciembre de 2014

Si en ti no hay miedo. En ti no hay nada, querida.
Entiende que a veces ni pienso, ni quiero, ni soy.
Discúlpame si me callo, pero dime ¿Valió la pena?
Ni contestes: Ni ese instante vales.
Pero prefiero perderlo todo si me aleja de ti.
Hasta a mí mismo me pierdo.

Pues tantas de mis palabras te pertenecieron,
y oré porque fuera mi voz grata a tus momentos.
Le oré a tu Dios para hacer mía tu mano.
Porque nunca se agotase el caudal de nuestros días.
Y te los llevaste.
Te llevaste mi voz y mis suspiros.
No los quiero de vuelta.
Porque me perdí en mí mismo, y en mí mismo me hallé.
Acepto mi parte, admito mi error.

He ahí la diferencia.

Ni siquiera te mereces un adiós.

No me duele el corazón, más bien me duele la cabeza.


lunes, 24 de noviembre de 2014

La Anomalía.

No me des dirección ni que me den ellos motivo
pues tengo el método, quizá la experiencia.
Sin orgullo lo digo, sino que es advertencia.
Que su presencia no vuelva nunca jamás
a perturbar tu existencia.

Que no respiren a mis expensas.
No es asunto de justicia, ni venganza.
Sino prueba de naturaleza llana
Más dirá la prensa ajuste de cuentas.
"Irreconocible", clamarán sus planas...
Si es que las hay.
Y tomará tiempo.

Naturaleza llana: Simple supervivencia.
De quien con los míos no se mete.
No es poesía ni belleza,
ni será digna de tus ojos esta obra maestra.
Pero te lo juro, mi amor.
Y me duele adminitrlo, honestamente
Este retrato gore no es tan pesadilla.
como sueño de despertar sonriente.

Lo asumo.
No es justicia.
No es venganza.
Medio por ti, medio por mí.
Mi voluntad y mi capricho.
Pero lo hecho, hecho está.
y quizá no solo dicho.

De llamar a la puerta que se de por muerto.
Y Dios quiera que por propia mano.
No me arrepiento de su cuello abierto.
¿El peor caso?
Accidente.
¿Encubierto?
Andaba tarde por la calle oscura
del sabido violento puerto.
¿Coincidencia?
No veo móvil causal presente
que amerite comparecencia.
¿Cómo me cree capaz?
No tengo yo experiencia.
Carta firmada, ni correr puedo,
y de moral de conforma mi credo.
Usted pregunte.
Yo aquí me quedo, siempre sonriente.

Inocente.

Y eso en el peor caso en que lo hallen pronto.
Semanas toma en esa zona.

Y eso en el peor caso de que logren reconocer el rostro.
Sus rasgos la piedra detonan

Y eso en el peor caso de que reconozcan los dientes.
Pero los he sacado y molido

Y eso en el peor caso de que no acabe en fosa común.
Como vil muerto sin rostro o nombre.

Y eso en el peor caso que sería
que a alguien esa mierda le importe.

viernes, 14 de noviembre de 2014

Demente


¿Si es tu voz la de mi conciencia?
¿Que si mi pesar es tu carencia?
No me apetece dormir
acompañado de tu ausencia.

Vi el reloj del padre tiempo
y descubrí así que no bastan
ni horas, ni días, ni un momento
para entregarte cada aliento
Lo que es tuyo.
Discúlpame si me inmiscuyo
no evite el verte pasar.
No era mi intención del todo
mas me tuve que enamorar.
No, no, no.
No digas nada,
Todo es culpa de tu mirada
De repente me vuelve loco.
Un desquicio y te provoco.
Estoy demente.
Demente

¿Encontraré acaso las justa frase
para recitarle a tus labios?
¿Lo escuchas acelerarse?
Siente como late con tu palma
Me tienes, mi amor, me tienes de cuerpo.
Me tienes de alma.
Me tienes demente.
Demente.

lunes, 10 de noviembre de 2014

Esta noche.

Esta noche solo quiero quedarme acostado.
Amor, ven a mi lado;
aunque sé, y créeme, perdón:
No seré buena compañía.
Caen los dados en el ron
Ya no aguanto, niña mía.
Este vaso huele a espejismo
Mira que no se que nombre darle
Si no es ausencia de mí mismo.

Viento, óyelo.
Corre y llama lento
Canta en la distancia la luna
Lastimera tristona a momentos
Llama este faro a otro puerto
Y mi consciente en tanto ayuna.

Viento, óyelo.
Corre y llama lento
Contestando a su soplo te vi
Aguardo el tiempo mi suerte
No es que yo piense en la muerte,
sino que ella piensa en mí.

domingo, 9 de noviembre de 2014

Insomnio.

Hace un tiempo dijiste "Quiero olvidar el pasado" a gritos casi.
Deshacer.
Des-mirar.
Des-vivir.
Ya no más.
Velo más claro y déjame que te diga que lo vivido aquí te trajo ¿Por algo? ¿Hay un sentido?
¿Qué sé yo?
Y no importa, pero haz avanzado en el camino.
Has caído.
Amado.
Sufrido.
Hecho sufrir.
Con toda intención y a sabiendas.
Has dado tu alma, mente y cuerpo.
Has rondado en espíritus destilados envueltos en vidrio.

Aprendiste.
Caminando.
No quiero olvidar, nunca me lo permitas.
No quiero olvidar, no quiero caminar el mismo camino.
No quiero olvidar, más eso no significa que los recuerdos se volverán insomnio.
Porque estas en paz.
En paz conmigo mismo.
Te perdono, porque tú lo necesitas, no porque haya algo que perdonar. No hiciste mal, te dejaste llevar. Pero fue eso lo que te hace alzarte hoy y con más intensidad de la que pedías olvidar gritas a todo pulmón "TODO HA VALIDO LA PENA." Porque esa es tu decisión, porque tú eres quien con tus acciones lo demuestra.
Te perdono, eras joven, lo sigues siendo y aun desconoces.
Te perdono, no temas.

El temor al ciclo eterno de Me alzo y caigo ¿No?
Basta, detente.
Duerme y sonríe, que te sobran razones para hacer ambas cosas.
Largos días.
Buenos días.
Buenos: tan de ella.

QUE NO TE IMPORTE NO SABER
Nadie sabe.
Pero en ti queda decidir.
Cuando decidiste sufrir, sufriste.
Cuando decidiste cagarla, la cagaste.
Cuando dejaste de lado tu propia humanidad, dejaste de ser quien eras y te odiaste a ti mismo.
Has pagado tu penitencia.
No busques el perdón que ya tienes, sino el de ti mismo.
No busques en el templo lo que has perdido en tu corazón.

No temas a la oscuridad, pues tras la noche llega el día, y cuando así sea, cuenta te darás de que no eres ya el mismo de ayer.
Deja que la noche disuelva tu pasado y lo aclare, se consciente.
No se trata de olvidar ni de ignorar.
No se trata de cambiar.
Acepta, y así las primeras no harán falta y la segunda ya habrá pasado.

Lo único certero es que no hay certeza absoluta.

domingo, 2 de noviembre de 2014

El señor Pepino.

Seguramente al escuchar el titulo de esta historia pensaste algo así como Oh este cuento seguro trata de las aventuras de un pepino con ojos y piernas el cual vive en una ensaladera o alguna mafufada por el estilo. Pinches ideas mariguanas, yo le hecho la culpa a Disney por hacer que la gente imagine tanta cosa.

Pues no: el señor Pepino es una persona común y corriente como tú o como yo, y vive en una ciudad común y corriente como la nuestra; ya sabes a qué me refiero ¿no? Gente que se gana la vida robando a otros, asesinos en serie que se sientan junto a ti en el camión, curas rezándole al Padre (al Padre Maciel, tal vez; no me he molestado en ver a cual padre le rezan con tanto fervor), los temibles roba-chicos... y por supuesto, los hombres tlacuache que viven en las alcantarillas... En fin, me tomaría años contarte de los peligros que nos asolan en cada esquina, además de que este cuento no trata de eso, sino del señor Pepino.

El señor Pepino es un señor de 76 años que vive en una choza hecha de barriles a un lado de las vías del tren. Él vive felizmente de pepenar la basura que los mugrosos turistas echan en las vías, de robar de vez en cuando en los trenes, de cazar ratas y de sus acciones de Microsoft. Le encantaba su vida solitaria y humilde, a las afueras de la ciudad, alejado de los citadinos imbéciles. Hasta que un día unos empleados del gobierno fueron a decirle que debía desalojar su casa, pues necesitaban espacio para las vías del nuevo tren bala supersónico. Así fue como el Señor Pepino debió dejar atrás su hogar e ir a la ciudad en busca de una nueva casa. Dejó su choza de barriles al lado de las vías del tren por una choza de ladrillos más o menos decente, construida justo a la mitad de una concurrida avenida.

Como allí había policías el señor Pepino no podía robar, pues a los policías no les agrada la competencia, así que debió buscar un trabajo normal. Pensó que podría trabajar en una sexshop o un table dance, pero el único lugar en el que consiguió empleo fue en la oficina de correos. Allí él se entretenía viendo los dibujillos pendejillos de las estampillas, jugando con el contenido de algunos paquetes que abría, y revisando los apartados postales de la gente... Pero por las noches no podía dejar de pensar en su choza de barriles junto a las vías del tren... Hasta que de pronto una mañana algo quebró la quietud cuando el sonido de unos gritos lo despertó. Voto por voto, casilla por casilla. El grito de mil voces al unísono manifestándose en medio de la avenida dónde él vivía. Entonces lo entendió: si él no podía hacer nada, el gobierno tendría que hacerlo. Así que el señor Pepino se fue hacia la oficina del gobierno a hablar con el gobierno.

Después de tres días, de explicarle a todo el personal lo que le había pasado, de gastarse todo su cambio en una maquina expendedora para conseguir una barrita de piña, de esperar horas y horas en la sala de espera, de llenar 36 veces la solicitud para que le entregaran una forma 4B sellada, de pedir fiadas dos docenas de copias de lado y lado de su credencial de elector, y de hablar por 20 minutos con un hombre feo y gordo al que todos llamaban "Señor Gobernador", se decidió que se le daría un trabajo en el tren bala y así podría estar cerca de las vías del tren.

Al principio fue divertido: no había tantos citadinos imbéciles. Pero con el tiempo dejó de serlo: No podía asaltar a los pasajeros, ni había ratas que cazar (aunque llegó a ver un tlacuache en una ocasión) y sus acciones de Microsoft estaban a la baja... los días eran largos y aburridos, y no hacía más que comer barritas de piña de la máquina expendedora (la cual sí funcionaba, al contrario de la del gobierno) y mirar por la ventana, pero en uno de esos aburrido días, tras de un par de paquetes de barras de piña, lo vio, un pequeño barril tirado al lado de las vías del tren bala. Lo vio, sonrió, y dicen que nunca más lo vieron en el tren, y que las barras de piña se quedaron en la máquina hasta que caducaron.

El señor Pepino es un señor de 77 años que vive en una choza hecha de barriles a un lado de las vías del tren bala. Él vive felizmente de pepenar la basura que los mugrosos turistas echan en las vías, de robar de vez una que otra maquina expendedora, de cazar ratas y de sus acciones de Microsoft (que han estado a la alza) y déjenme decírcelos: Nunca había visto a nadie ser tan feliz.

jueves, 23 de octubre de 2014

Un invierno atrás

Ni un minuto más de no ser quien no soy.
Calla ya, cierra la boca, sólo quiero caminar.
Si por buscarte me perdí.
Si por tenerte hasta sufrí.
Si por vivirte, no viví.

¿Apercepción?
Ni eres ni fuiste alucinante
Salte de tu puto papel, acaba este acto repugnante
Ya que más da la piel impune, es solo carne lo que llama,
mas ni siquiera ella te ama.
Si cuanto más fuerte gritaba menos importaba mi voz.
Si cuanto más tiempo pasaba menos sentía que eramos dos.
Quemo nuestra cama. Quemo nuestros sueños.
Y ya no hay quien los exhiba
Quemo también viejas cartas y no habrá quien las reescriba.
Su llamarada quizá sirva para encenderme este Cohiba.
Una humarada de paciencia. Onírica providencia.
Maldita sea tu presencia.
Benditos sean los callejones en los que escondí mi decencia.

Pero heme aquí, ya despertado.
Heme tomado conciencia. Heme sabiendo bien quien soy,
y no soy tuyo.
Con ojos nuevos veo lo erróneo. Veo a la avanza.
No hay venganza. No eres nada.
¿Lo fuiste? No sé.
Bendita sea la remembranza.
Bendita sea la conciencia de tu verdadera esencia.
Pero maldita mi vieja usanza.
Mio antes que de nadie.

Permíteme esta noche poder respirar tu ausencia.

domingo, 9 de marzo de 2014

Oro.

Pues si esta noche decide el cielo,
oro para que respete mi efímero duelo.

Pues si esta noche decide la luna,
oro para que ella nunca más nos reúna.

Pues si esta noche decide una estrella,
oro para que otro te crea su doncella.

Pues si esta noche decide tu cama,
oro para que sea otro quien cree que te ama.

Pues si esta noche deciden tus ojos,
oro para que otro consuma tus despojos.

Pues si esta noche deciden tus manos,
oro para que otro queme tu Imperio Romano.

Pues si esta noche deciden tus labios,
oro para que se me cure este puto resabio.

Pues si esta noche deciden tus mentiras,
oro para perdonar y olvidar esta ira.

Pues si esta noche deciden tus cartas,
oro para que otro te bese hasta que quedes harta.

Pues si esta noche deciden tus uñas,
oro porque no sea mía la espalda que aruñan.

Pues si esta noche decide tu nombre,
oro para olvidarlo sin que eso me asombre.

Pues si esta noche decide tu cara,
oro por no ser más quien un día la marcara.

Pues si esta noche deciden tus besos,
oro porque de ti ya me desintereso.

Pero si esta noche eres tú quien decide...
Oro por no ser yo quien de nuevo reincide.